mucho gusto.

Idas y venidas de ideas en desorden.





"Árbitro: Chinga tu madre hijo de puta, putísima"

Hoy grité con todo lo que dan mis pulmones. Grité porras. Grité groserías. Grité muchísimas veces "no maaaaaaa......" que es la onomatopeya de la frustración. Le grité muchísimas veces mas al árbitro que era un hijo de puta, putísima. Y de paso se colaron entre mis delicadezas lingüísticas una que otra mentada de madre a los once enemiguitos vestiditos de moradito bien bonito (¿?). Había uno que no se conformó con vestir uniforme purpúreo sino que además, orgulloso, se calzó zapatillas rojas. Zapatillas de futbol, claro, aunque eso no le quitó lo... lo.... lo...

Fuí testigo de como la desesperación causa mucho dolor, sobre todo en las piernas del rival, porque de puro coraje aquellos, los frustrados, se dedicaron a tirar patadas. Yo hubiera hecho lo mismo.

Si yo fuera balón de futbol me gustaría estar en el fondo de la portería de los rivales.

Los Pumas se caen a pedazos y muy probablemente hoy fuí un gritón testigo más del fin de una era, del ocaso de un reinado maravilloso, de la extinción de una luz que guió e iluminó los corazones de muchos que, como yo, somos y seremos fans. Nos hicieron felices.

Gracias, de todo corazón, a Hugo y su gran gran gran equipo.

gonX

p.d. Sometimes you can't make it on your own nos dicen los iutú. A veces, uno nomás no puede solo.

Es que ví el video de esa rola y me gustó porque las historias de padre e hijo me conmueven.
| Siguiente »
| Siguiente »
| Siguiente »
| Siguiente »
| Siguiente »
| Siguiente »
| Siguiente »
| Siguiente »
| Siguiente »

Siendo las 10:23 a.m., Blogger Cory dijo...

Eso espasión (toing!) y yo que nunca he ido a un estadio...    



» Publicar un comentario